El Nuevo Reino (post de San Valentin)

La princesa del reino sin corazón… sobre esto escribía hace más o menos un año.

Siempre haciendo alarde de que nadie por estos lados del charco venia buscando cariño del puro y verdadero, y de como yo, con mi poca capacidad de involucrarme sentimentalmente ya me había conformado con eso.

Lo cierto es que llegó un momento en el que ya no estaba conforme. No estaba buscando marido pero si alguien con quien de verdad me dieran ganas de arruncharme, porque es que ya se venía el invierno y hacer cucharita con Patricio no iba a ser suficiente. Yo no buscaba un man perfecto, noooo. Yo sé que eso no existe. Pero por ahí una de esas amigas locas que uno se consigue en la vida, me dijo que escribiera una listica con lo que quería y que se lo encomendara a uno de esos santos y arcángeles como La Virgen de la Piedra Pómez.  Yo, muy obediente solo tenía una pequeña lista de varios aspectos que me gustaría que este individuo tuviera.

Mucho pedir?... No creo!

Que tan difícil podría ser encontrar un man:

Que cocine

Que baile salsa

Que no sea machista

Que no sea Uribista

Que sea inteligente (para ser inteligente hay que haber completado el punto anterior – valga la aclaración-)

Que practique un deporte

Que sea buen hijo y hermano

Que sea buen amigo

Que tenga buen culo

Que tenga “destreza física” para desarrollar buenas actividades extracurriculares (mi papá lee mi blog…)

Que hable español

Que le guste leer

Que sea detallista

Que me escuche

Que no sea elitista, ni racista, ni homofóbico

Que sea un poquito revolucionario

Lo triste del asunto es que como mi amiga me dijo que esta lista había que leerla diariamente, entre tanta cambiadera de bolso… perdí mi lista! Al principio me dio mucha vergüenza y solo quería que la lista la hubiera encontrado un chino que no entendiera nada y la tirara a la basura. Luego pensé que la Virgen de la Piedra Pómez podría hacer de las suyas para que un chico inteligente, de esos que vienen en referencia mejorada y con culo, que hablara español (no necesariamente como primera lengua) y le gustara leer, encontrara mi lista, se sintiera identificado y fuera a la fiesta mensual de salsa y tuviera el detalle de presentarse.

… y Bueno; así sucedió, que ya no vivo en el reino sin corazón, ni soy mas princesa y hasta cursi me volví... y Entonces a mi déjenme contar esta historia, que suena mucho mejor que la realidad en donde ni siquiera la virgen de la Piedra Pómez existe.  

Happy valentine's day desde mi nuevo reino :)