Obra y Omisión
Todos
sabemos que el 2016 ha sido uno de esos años atípicos, locos, de esos que
queremos que se acaben pronto y nunca regresen.
De esos a
los cuales no les cantaremos ni agradeceremos la chiva, la burra, la yegua ni
la suegra.
En mis
redes sociales, he visto al 90% de mis contactos tomar partido o hacer algún comentario
sobre elecciones presidenciales, referendos, plebiscitos, caídas de aviones,
entre otros.
A pesar de
haber taaanto pacifista rondando en mis redes sociales, solo un bajísimo porcentaje
de mis contactos se ha pronunciado sobre la situación de Siria y Aleppo.
No veo
gente curiosa por entender lo que está sucediendo allá, estudiando el caso como
se han estudiado el CV de Rafael Uribe Noguera y toda la información amarillista
que sale en los medios de comunicación.
No he visto
a la gente compartiendo videos o links sobre cómo Rusia subsidia al estado
Sirio para acribillar a los opositores sin importar a quien se llevan por
delante, ni de la forma como los rebeldes retienen a los civiles en sus zonas
de influencia. Pero todos mis contactos compartían parodias y debates de Trump
y Clinton.
No he visto
más de 5 contactos repudiando los bombardeos, dando su posición política, económica
y HUMANA de lo que pasa al otro lado del charco.
Foto: BBC News
La gran mayoría
nos hacemos los locos al ver la forma como hemos involucianado y otra vez
hablamos de “conquistar Palmira” como si lo leyéramos en un libro de historia
de la escuela.
Para casi
nadie es repudiable ver de nuevo juegos de poder en el escenario mundial donde se manipulan guerras civiles para alcanzar intereses politicos, para saciar un poco hambres de poder.
Queridos
amigos, aquí todos somos ciudadanos del mundo. La muerte violenta de una
persona en Siria, Kazajistán, el Congo o Bogotá debería ser igualmente
repudiada, comentada y protestada. No puede ser posible que pasemos la página e
ignoremos la realidad de miles de personas inocentes.
Catolicos….
Por omisión también se peca.
https://www.unicef.es/donacion-siria
Es la triste realidad, hay muchas clases sociales en el mundo y la media las replica y nosotros seguimos como idiotas. Gracias por tu reflexión
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